Todo suele empezar con una llamada, una conversación en el messenger, un mail, una cita previa, un mensaje de texto, una fecha en el calendario...en realidad no se como suele empezar un fin de semana, pero al menos se como suele terminar: con un domingo fatal y con un cuerpo que me recuerda que hace rato pase los 30.
No obstante, este fin de semana, como dirían los Shapis, tenía una cruz marcada, el Cruz Velacuy de Antropología, insigne y clásico festejo del cual tengo ya 15 años de recuerdos que mezclan la devoción a este tan conveniente Catolicismo Popular, el pago a la tierra, la comida, el alcohol, la música, la bronca de las 4 de la mañana y uno que no sabe como empezó todo y menos como irá a terminar, porque normalmente cuando empieza a amanecer no tenemos conciencia de que está sucediendo, somos gladiadores invencibles decididos a derrotar a la madrugada con todas las armas que tengamos a la mano.
Recuerdo que la fiesta empezó muy lenta, recuerdo al Apu Carmona y lo recordaremos siempre como un gran amigo y compañero de madrugadas con su eterno ritual,, recuerdo haber bailado música chicha, recuerdo haber bailado contigo y no me importaba si era música chicha o salsa cubana. Pero la tradición es que la fiesta continúe y la juerga continua aunque nuestros cuerpos pidan descanso nuestras mentes están encendidas como una antorcha en medio de una batalla nocturna
A donde vamos, que hacemos, si a esa hora todo está cerrado, ¿ Porqué en toda la noche no independizo mi mente de tu presencia?. Y el día nos sorprende, los cuerpos deben descansar, sobre todo si mas tarde el adobe nos ha de ensimismar en un cúmulo absorvente de sensaciones, de imágenes , de versos, pero sobre todo de desorden.
Domingo : El último día del adobe, el primer momento de la destrucción, el silencio inconmensurable, el inevitable paso del tiempo, los cuerpos que se enfrascan en luchas sin cuartel, la desnudes absoluta, el calor del abrazo, el sabor de un beso. Eres mi héroe Alfie...(no sería mala idea un nick que diga.. Alficha..eres mejor que Superman)
El día ha transcurrido como si la noche hubiera alterado su orden natural, no pude llegar al almuerzo, no pude llegar al fútbol, no pude vencer al sueño, la resaca me ha vuelto a derrotar. He dejado a mis amigos enfrascados en el último día del Adobe y en el frenesí de lo prohibido.
Empiezo a caminar rumbo a casa, tengo tantas imágenes, tantas cruces, tantos adobes, tantos años empezando mayo de la misma manera. Me detengo a observar una cruz y veo que la han vestido con fluorescentes, y término una vez mas sin comprender mi entorno, es mas, si ni siquiera se como empezó este fin de semana menos he entender como luces de neón visten a este leopardo cosmopolita. Llego a casa y oigo cuetones reventar, en algún lado siguen festejando, que bueno es saber que hay gente a la que el domingo le da lo mismo que el viernes, que al margen de todo lo bueno y lo malo..esta ciudad seguirá siendo por mucho tiempo mas : mi conflicto.
PD. Olvide decirte que me agrandan los mensajes de texto, sobre todo cuando el sueño empieza a vencerme
No obstante, este fin de semana, como dirían los Shapis, tenía una cruz marcada, el Cruz Velacuy de Antropología, insigne y clásico festejo del cual tengo ya 15 años de recuerdos que mezclan la devoción a este tan conveniente Catolicismo Popular, el pago a la tierra, la comida, el alcohol, la música, la bronca de las 4 de la mañana y uno que no sabe como empezó todo y menos como irá a terminar, porque normalmente cuando empieza a amanecer no tenemos conciencia de que está sucediendo, somos gladiadores invencibles decididos a derrotar a la madrugada con todas las armas que tengamos a la mano.
Recuerdo que la fiesta empezó muy lenta, recuerdo al Apu Carmona y lo recordaremos siempre como un gran amigo y compañero de madrugadas con su eterno ritual,, recuerdo haber bailado música chicha, recuerdo haber bailado contigo y no me importaba si era música chicha o salsa cubana. Pero la tradición es que la fiesta continúe y la juerga continua aunque nuestros cuerpos pidan descanso nuestras mentes están encendidas como una antorcha en medio de una batalla nocturna
A donde vamos, que hacemos, si a esa hora todo está cerrado, ¿ Porqué en toda la noche no independizo mi mente de tu presencia?. Y el día nos sorprende, los cuerpos deben descansar, sobre todo si mas tarde el adobe nos ha de ensimismar en un cúmulo absorvente de sensaciones, de imágenes , de versos, pero sobre todo de desorden.
Domingo : El último día del adobe, el primer momento de la destrucción, el silencio inconmensurable, el inevitable paso del tiempo, los cuerpos que se enfrascan en luchas sin cuartel, la desnudes absoluta, el calor del abrazo, el sabor de un beso. Eres mi héroe Alfie...(no sería mala idea un nick que diga.. Alficha..eres mejor que Superman)
El día ha transcurrido como si la noche hubiera alterado su orden natural, no pude llegar al almuerzo, no pude llegar al fútbol, no pude vencer al sueño, la resaca me ha vuelto a derrotar. He dejado a mis amigos enfrascados en el último día del Adobe y en el frenesí de lo prohibido.
Empiezo a caminar rumbo a casa, tengo tantas imágenes, tantas cruces, tantos adobes, tantos años empezando mayo de la misma manera. Me detengo a observar una cruz y veo que la han vestido con fluorescentes, y término una vez mas sin comprender mi entorno, es mas, si ni siquiera se como empezó este fin de semana menos he entender como luces de neón visten a este leopardo cosmopolita. Llego a casa y oigo cuetones reventar, en algún lado siguen festejando, que bueno es saber que hay gente a la que el domingo le da lo mismo que el viernes, que al margen de todo lo bueno y lo malo..esta ciudad seguirá siendo por mucho tiempo mas : mi conflicto.
PD. Olvide decirte que me agrandan los mensajes de texto, sobre todo cuando el sueño empieza a vencerme
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